La nutrición de los pueblos no es un negocio
Los enfoques corporativos han llevado a una separación artificial de la nutrición y los sistemas alimentarios sostenibles, resultando en soluciones verticales, técnicas y basadas en productos que ignoran los determinantes sociales, económicos, políticos, ambientales, culturales y de salud. En un mundo en el que cientos de millones de personas están subalimentadas y en el que 500 millones padecen obesidad, las comunidades de todo el mundo consideran que evitar la captura corporativa es una cuestión crítica. La soberanía nutricional de los pueblos y los principios fundamentales de derechos humanos son pilares inalienables para hacer frente a la desigualdad, la opresión y la discriminación, y es clave democratizar las sociedades nacionales y mundiales.
La edición de 2015 del Observatorio del Derecho a la Alimentación y a la Nutrición pone el foco en la nutrición y revela los impactos de las operaciones empresariales en los medios de vida de los pueblos. El concepto de nutrición se evalúa desde una perspectiva de derechos humanos, yendo más allá de la mera medición de nutrientes en los alimentos y los cuerpos humanos para considerar el contexto socioeconómico y cultural en el que se alimentan los seres humanos. "La nutrición de los pueblos no es un negocio" explora las visiones de la nutrición en conflicto, las causas de la malnutrición y las respuestas de políticas, que a menudo afectan a las mujeres de forma desproporcionada, entre bastidores y en la esfera pública. Deja al descubierto los abusos y la impunidad corporativos generalizados, y presenta recomendaciones para que los Estados prevengan y castiguen las iniciativas que obstaculizan el disfrute del derecho a una alimentación adecuada y a la nutrición.